El segundo disco favorito del año nos llega desde Australia Occidental, de la ciudad de Fremantle, y con el sello de calidad de Meritorio Records, que distribuye el disco para Europa. Spice world son un cuarteto formado por Jonny Burrows, Lyndon Blue, Rhian Toddhunter y Julia Suddenly, y el disco se titula “There is no I in Spice world” (Tenth court / Meritorio Records, 2023).
La música de Spice world nos lleva a un lofi con bastante aroma a noventas, y de hecho la preparación del disco se hizo a través de diversas grabaciones caseras y el resultado final se grabó en escasas cinco horas, según sus propias notas en Bandcamp. Ese sonido lofi es por supuesto uno de los mayores encantos del disco, las canciones de este disco de debut están llenas de frescura e inmediatez, y dejan ese poso que tiene algo que se hace entre amigos y para pasar el rato.
Aún así, el resultado está lleno de belleza, si no tanto en las melodías sí en los trajes musicales sobre los que se apoyan las canciones. En algunas de ellas este belleza llega a emocionar, como en “Trouble”, “Mountain pony” o “Friend of mine”. En otras, el ambiente de amistad se impone y el resultado son unas piezas festivas con una alegría que se contagia, como en “Decorated boy scout” (que podría estar perfectamente en algún disco de Violent femmes), “Time time turn around” o la que cierra el disco, “Dying to go”.
Como ellos mismos dicen, un disco surgido de la amistad y de los buenos ratos que se pasan entre amigos y compañeros. Algo de eso se transmite también en el título. Y, desde luego, se nota.