(Fotograma de la película)
Hace unas semanas pude ver «Baby», la última película de Juanma Bajo Ulloa, al que no volví a ver desde «Airbag» (no busquéis motivos ocultos, no los hay). En realidad en los más de 20 años que han pasado desde «Airbag» el director vasco solo ha hecho tres películas, y la última es esta.
La película en sí es muy extrema, más aún que sus primeros trabajos, y lleva al espectador al límite por varios motivos. Aún así no es eso lo que quiero destacar; lo que trae a Bajo Ulloa y a «Baby» a este fancine es la canción que, quizá como contrapunto a ese extremismo que llena la historia y las imágenes de la película, ayuda a traer al espectador a la calidez de la tierra. Pocas veces hay una canción tan bien utilizada en una película.